AMECA: "SIGNIFICA MECATE DE AGUA O LUGAR ARRIBA DEL AGUA"
El municipio de Ameca enclavado en el valle que lleva su nombre, con una extensión de 774 kms2 aproximadamente. Atravesado en parte por el rio que también es conocido como Pijinto y que divide la cabecera municipal en dos, encontrándose esta al poniente de Guadalajara a 78 kilómetros de distancia.
La ciudad se extiende en la parte sur del majestuoso cerro del Águila y a una altura de 1,240 mts. sobre el nivel del mar entre los 20° 33' de latitud norte y los 104° 21' de longitud oeste.La existencia del pueblo lo es desde mucho antes que pisara su fértil valle Juan de Añesta, español que solo, descalzo y con su espada conquistara a los antiguos moradores del viejo pueblo de indios AMECAN. Quienes también habitaban las laderas altas y ásperas del CUAHUTEPETL.
El encargado de la orden Franciscana en Etzatlán, Fray Antonio de Cuellar, junto con otros evangelizadores edificaron ya casi al final de 1529 una capilla de adobe y techo de zacate. Hacia el año de 1548 ya se habían levantado varias casa habitación para algunos españoles encomenderos con sus familias, la casa real, la plaza, la cárcel y hasta un mesón en lo que hoy es el centro de la ciudad.
En el tiempo de la colonia, Ameca perteneció a la Real Audiencia de la ciudad de México en lo político, esto es, que estaba en la jurisdicción de la Nueva España y en lo religioso al entonces Obispado de Guadalajara, no fue hasta que se estableció la intendencia de Guadalajara en 1786, año en que Santiago de Ameca pasó a formar parte de la subdelegación de Autlán.
El Congreso del Estado de Jalisco por decreto de fecha 22 de abril de 1833 a Ameca se le concede el título de ciudad. De las mas de 20 haciendas establecidas algunas desde la colonia, en este fértil valle.